En Saltillo se muestra con orgullo las mejores artesanías de la entidad. Algunas son de origen tlaxcalteca y han caracterizado no sólo a la cultura regional, sino a todo México. La principal y más característica artesanía de Saltillo son los tradicionales sarapes o “saltillos”, prendas multicolores de lana y algodón elaboradas en telares de mano.

Otras artesanías típicas de la región son los trabajos en vidrio, talabartería, madera de mezquite y pisos de barro. Las artesanías de este tipo las podemos encontrar en los mercados. En la Feria de Saltillo, encontramos sarapes con diseños modernos, joyas y esculturas de hierro forjado.

Hay artesanías de teniztete y coyonoxtli, grabado en cerámica, cristal y laja, así como jarciería, muebles rústicos de madera y fluorita, cartonería y muñequería, pashminas con cintilla y nudos de macramé, artesanías de reciclado, joyería tradicional y  alfarería, herrería, productos orgánicos, escultura de barro, pirograbado, teja y laja decorativa y inclusive un poco de arte gótico.

Algunos dulces típicos de Saltillo son la gloria, el rollo relleno de fruta cristalizada TRES ROSAS, queso de nuez, de higo y de tuna, encanelados, cocadas de piña, pasas y leche, noras, abuelos, chiclosos, jamoncillos, cajeta, crema de frutas como manzana, membrillo, piña, cafe, menta, almendra, granada, coco, durazno, fresa. Aunque también cuentan con dulces sin azucar endulzados con edulcorantes artificiales, tales como las glorias, obleas, chocolate, ates, almendras y pasas con chocolate, rollos de guayaba, caramelos, etc.

Las artesanías de un lugar son un elemento importante para la cultura y el comercio. Es una forma de mantener vivas las tradiciones y el arte propio de la región a la vez que su venta aporta un ingreso para la zona. Muchos lugares son famosos por sus artesanías lo que muestra que además de todo, las artesanías también aportan un fomento turístico.